Pasó la Semana Santa y, entre la alegría porque CRISTO RESUCITÓ, y el incremento en los niveles de azucar po huevo y huevo de Pascua, me puse a reflexionar un poco mas sobre el aspecto "marketinero" de nuestras labores pastorales, y llegue a una conclusión a la que nunca antes habia llegado:
Nuestras parroquias son sino la primera, una de las instituciones que dilapida mas facilmente su poder de convocatoria.
Y lo peor, es que esta afirmación es muy facil de contrastar con la realidad, y de una manera bien simple: todo aquel que haya concurrido a una misa en Semana Santa (En especial, Sabado Santo y Domingo de Ramos) y luego participe de una Santa Misa cualquier otro domingo, puede darse cuenta de esta realidad; que si nos ponemos un poco mas de exigencia, bastará comparar en un año, la cantidad de bautismos, y comuniones, contra la cifra de matrimonios, confirmaciones y participación en los diferentes grupos de la comunidad...
La reflexion que esto amerita, es darnos cuenta que, aún teniendo un público "fiel" que anualmente viene a nuestros templos, no sabemos encontrar la forma de construir un canal de comunicación para el resto del año, con lo cual, somos capaces de perder decenas, cientos de oportunidades de acercar a nuestros hermanos a aquellos lugares que, cada uno con sus posibilidades, pueden llegar a ocupar... ¿se imaginan si solo un 30% de los que concurren en estas "fiestas" a nuestra parroquia decidieran seguir viniendo durante el año? Sencillamente, sería un boom que revitalizaria toda nuestras Iglesias.
Ahora, lo que yo me pregunto es:
- ¿Queremos realmente lograr algo asi?
Vamos a seguir tratando en los proximos post, este tema, porque la verdad, asi como de inquietante, seguramente tambien ustedes compartan que es apasionante...
Por último, les dejo el link de la página de una parroquia de nuestra diócesis que me pasaron: http://www.cristoreyguernica.es.tl
No hay comentarios:
Publicar un comentario